Lo que cubren los daños estéticos de un seguro de hogar son los gastos necesarios para restablecer la composición estética de los elementos dañados durante el siniestro cubierto por ésta, es decir, para hacer que recupere el aspecto anterior al siniestro.
Así, cuando sea imposible reemplazarlos por materiales o bienes idénticos a los existentes, se estipula que se utilizarán materiales que tengan una calidad similar. Por tanto el objetivo de la cobertura por daños estéticos es mantener el diseño o la imagen anterior al siniestro.
Volviendo al ejemplo inicial, al no tener incluida la cobertura por daños estéticos, la aseguradora únicamente está obligada a arreglar la parte que se ha visto afectada. En estas situaciones, gracias a esta cobertura, si al hacer la reparación no queda toda la superficie igualada o existe un contraste de color, deberán cambiar la totalidad de la superficie.
¿Por qué es importante tener en cuenta los daños estéticos?
Porque no tenemos que hacer frente al pago de la reparación completa cuando existe una póliza que nos lo cubre. En caso de tener un daño estético cubierto por el seguro de hogar la compañía deberá pagar hasta el límite establecido en la póliza.
Muchas veces el desconocimiento nos hace pagar servicios que están incluidos en nuestra póliza. ¡No queremos que tires tu dinero! Por ello, siempre recomendados tener un mediador que sepa como actuar ante un siniestro y sepa reclamar a la compañía de seguros la indemnización pertinente.
Indemnización por daños estéticos del seguro de hogar
La indemnización del seguro por daños estéticos debería pagarse siempre, independientemente de lo que el asegurado decida hacer con ese dinero. Algunas aseguradoras condicionan el pago de la indemnización a la supuesta obligación del asegurado de reparar el daño.
Es cierto que la ley establece que el asegurado no puede enriquecerse mediante una indemnización, pero si la cuantía de la indemnización no supera el coste de reparación del daño producido, la compañía no puede cuestionar los derechos del asegurado, que puede hacer con el dinero de la indemnización lo que quiera.
Limitaciones a tener en cuenta
1- Verifica que tu póliza incluye la cobertura de daños estéticos tanto para el contenido como para el continente. Esto es importante ya que, ante cualquier imprevisto que pueda ocurrir, estarás cubierto.
2- Es importante determinar la cuantía máxima que tienes contratada para asegurar que la indemnización será completa en caso de que la necesites, pues está limitada económicamente. Nosotros recomendamos que el límite máximo de indemnización varíe entre 1.500€ y 2.500€, aunque, como siempre, habrá que analizar cada caso de forma particular.
3- Como en cualquier tipo de póliza, es esencial saber qué está cubierto por la póliza y cuáles son las exclusiones para evitar todo tipo de sorpresas desagradables.
¿En qué casos no se puede aplicar la cobertura de daños estéticos?
Esta cobertura únicamente se aplica al asegurado, es decir, que en caso de que el daño estético lo ocasiones tú a un tercero, la cobertura no se le aplicará a ese tercero.
Tu seguro de hogar cubrirá los daños ocasionados a terceros aplicando la cobertura de responsabilidad civil. Pero la compañía solo está obligada a reparar la avería, no el daño estético que se derive de ella.
Cuando el daño es causado por un tercero
Cuando el siniestro es causado por un tercero, muchas veces nos encontramos con daños en que la cobertura de daño estético no cubre totalmente el coste de la reparación del problema.
Este hecho suele darse sobre todo cuando el siniestro afecta a muebles de cocina, donde los costes de reparación pueden ser más elevados.
En estos casos, lo normal es que la aseguradora no te informe de tu derecho a reclamar al causante el importe total de la reparación, debido a los convenios entre aseguradoras. En estos casos, tengas o no tengas la cobertura de daños estéticos, debes reclamar que el seguro de Responsabilidad Civil de la aseguradora del causante del daño, se haga cargo de la reparación del mismo.