Sobre las extensiones de pestañas…

Esta nueva moda de agrandar las pestañas, ofrece un efecto impresionante que hace innecesario el uso de máscaras de alargamiento o de las pestañas postizas. Las extensiones de pestañas, no causan dolor y resaltan de inmediato el contorno de los ojos, dando longitud, frondosidad y relleno en el arco del párpado. Su aplicación es una de las técnicas de embellecimiento más favoritas del momento por las mujeres, ya que son ligeras, cómodas y fáciles de mantener.

Su diseño es diferente para cada persona que decida extender sus pestañas, por lo que se trata de un tratamiento de belleza personalizado debido a factores como la forma de delinearse el ojo, la cantidad de pestañas naturales o el estilo del párpado. A raíz de estos matices, podemos encontrar las siguientes ventajas:

  • Elimina el aspecto cansado en el contorno.
  • Rejuvenece la mirada.
  • Requiere cuidados especiales mínimos.
  • Ofrece densidad y volumen en párpados.
  • Se puede añadir maquillaje opcional.

No obstante, también cuenta con una serie de desventajas como por ejemplo, la sensación de párpados pesados o con ligero dolor. Por otro lado, no prestarlas atención o mojarlas en los primeros dos días, puede incrementar la probabilidad de sufrir dermatitis alérgica, orzuelos, enrojecimiento o queratoconjuntivitis. Por todo ello, debemos tener en cuenta tres recomendaciones básicas para determinar un buen resultado del tratamiento.

1- Seleccionar un centro estético y profesional con gran experiencia y certificados, para reducir la posibilidad de que las pestañas naturales sufran daños.

2- Información sobre el pegamento que se utilizará para ello, ya que la piel de los párpados es muy vulnerable a sustancias que contienen disolventes y conservantes.

3- La técnica empleada será la que defina el éxito del tratamiento, por lo que debería emplearse poca cantidad de pegamento, para no formar grumos y seguir los consejos del especialista, en cuanto a la densidad de los flecos, para que no queden pesados y podamos pestañear sin perjudicar a los músculos del párpado.