Actualmente son muchas las personas que a lo largo del año tienen un adecuado nivel de actividad física, siendo en muchos casos abandonado con la llegada del verano, al perder nuestras rutinas diarias. Desde aquí os animamos a adaptaros a las nuevas circunstancias y programar vuestra actividad física y/o deportiva a las posibilidades que la época estival nos ofrece.

CONSEJOS

Podemos aprovechar la mayor disponibilidad de tiempo libre, los días más largos y una adecuada climatología para llevar a cabo nuestra actividad habitual o explorar otras más adaptadas al entorno y las condiciones ambientales.

• Es muy importante la elección del horario, a primera o última hora del día, evitando las horas centrales, de mayor calor. Debes observar el pronóstico del tiempo y las posibles olas de calor.
• Debemos protegernos del sol, para ello siempre se utilizarán protector solar, gorra y gafas de sol.

• Habrá que hidratarse de manera adecuada antes, durante y después del entrenamiento o ejercicio.
• La ropa deberá ser ligera, transpirable, de colores claros y que nos permita movernos con comodidad.
• Con respecto a la comida debemos buscar un equilibrio, ya que la práctica de ejercicio con el estómago lleno afecta al rendimiento y a la digestión y por otro lado, un estómago vacío unido al calor puede provocar una lipotimia.
• A la hora de parar es mejor hacerlo de manera progresiva, realizando posteriormente ejercicios de estiramiento adecuados.
• Hay una serie de signos que nos indican que debemos poner fin a la práctica como dolores de cabeza, mareos, náuseas o calambres musculares. En estos casos, habrá que descansar e hidratarse adecuadamente.