La llegada del otoño y nuestra salud

Al igual que la naturaleza sufre el cambio de estaciones, nuestra salud también sufre una serie de cambios, afectando a nuestra salud física, mental y espiritual, como por ejemplo la ralentización de la función metabólica. Esto ocurre debido a que la síntesis de proteínas disminuye, por lo que tarda más en la regeneración del cabello, uñas, huesos y otros tejidos. Durante los meses de otoño, nuestras defensas suelen disminuir, por lo que es una época habitual de resfriados, gripes o catarros, afectando también a nuestros huesos y articulaciones por la llegada del frío.

A todo ello, también se suma la vuelta a la rutina y al trabajo, que pueden desencadenar problemas como el estreñimiento o la sensación de fatiga, incrementando el apetito y atrayendo sentimientos apáticos, depresión o dificultades para la concentración. Otros cambios que podemos experimentar con la llegada del otoño son:

  • La disminución de energía, aumentando la sensación de cansancio.
  • Modificación del carácter por uno más sombrío y reservado.
  • Menos ganas salir de casa y realizar planes.
  • Mayores desajustes del sueño, como el insomnio tras el cambio de horarios ya que anochece más temprano.
  • Proliferación de bacterias que traen consecuencias como enfermedades gastrointestinales, resfriados o gripes.
  • Aumentan los dolores de cabeza, en aquellas personas que suelen padecer de migrañas.

Para poder combatir los efectos que trae consigo el otoño a nuestra salud, debemos evitar ante todo, los cambios bruscos de temperatura, teniendo siempre a mano una prenda ligera con la que podamos abrigarnos cuando lo necesitemos. Otras recomendaciones que podemos seguir, son:

  • Practicar actividades de meditación para ayudarnos a restaurar la inestabilidad que nos invade durante el otoño.
  • Evitar trasnochas y levantarnos con la salida del sol.
  • Aprovechar los cambios de temperatura para sustituir las bebidas frías por las calientes.
  • No obligarnos a seguir una rutina estrictamente planeada con obligaciones que realmente no podemos alcanzar.