Todos conocemos el malestar que tenemos cuando sufrimos estrés, ya que no sólo afecta a nuestro estado de ánimo sino que también tiene consecuencias en nuestro organismo, a la hora de hacer frente a una situación difícil. Existen muchos mitos que deberíamos dejar de creer, ya que el estrés en ocasiones, puede resultar un tanto beneficioso para nuestra salud.

Muchas veces, mencionamos que el estrés es el motivo por el cual se producen los problemas emocionales, pero como todos sabemos, el estrés no es el único responsable de todo lo que nos sucede en nuestro día a día, por lo que a continuación, pasamos a desmentir algunos mitos acerca del estrés:

• «El estrés nos afecta a todos por igual». Es cierto que el organismo, tiene una capacidad de reacción al estrés sin importar nuestra edad o estado físico, sin embargo, no para todos es igual, ya que algunas personas pueden sentir más inquietud y otras, pueden sentirse más cansadas.
• «El estrés es el responsable de todos los problemas». Como mencionábamos anteriormente, tenemos la costumbre de echarle toda la culpa de lo que nos pasa al estrés, no obstante, estamos equivocados ya que el estrés no es el único responsable, sino que existen otros sentimientos que nos afectan a nuestra vida diaria.
• «El estés es muy difícil de combatir». Es uno de los mitos más difundidos y es cierto que en ocasiones, puede resultar un tanto difícil de resolver, pero no imposible. Existen tratamientos y técnicas que ayudan a manejar el estrés y aliviarlo, como por ejemplo pasar un día en la naturaleza.
• «El estrés solo afecta a las personas adultas». Es un mito que debemos eliminar por completo, ya que actualmente ha aumentado este trastorno en niños, a causa de las presiones familiares o por la gran cantidad de actividades extraescolares que tienen que realizar. Los niños, pueden padecer estrés en circunstancias como las mudanzas, la separación de los padres o por la pérdida de un ser querido.

Desmontando mitos como los anteriores, podemos mentalizarnos un poco más de lo que conlleva sufrir estrés y sobre todo, aprender a como sobrellevarlo.