Navidad y estrés

La Navidad, siempre se suele asociar con la celebración, la alegría, los encuentros, los festejos de la época, la unión familiar… No obstante, también es una época en la que algunas personas experimentan elevados niveles de estrés, tristeza y ansiedad, debido a múltiples y variadas razones para cada persona. Una de las razones más comunes por las que se suelen padecer estas emociones, es por la nostalgia que genera la Navidad, ya que no solo descansamos menos sino que también, tenemos más actividades durante estas fechas.

Principalmente, la Navidad tiende a incrementar la ansiedad, las emociones más desagradables y la tensión. La mayoría de las personas tienen una imagen tradicional de la Navidad demasiado optimista, por lo que cuando las expectativas irreales no se materializan, se experimentan emociones de frustración y depresión. Por otro lado, con el auge de las redes sociales, esto es más frecuente, sobre todo cuando los demás, comparten a través de las redes sus «Navidades perfectas», generando en la otra persona una presión adicional y una obligación de celebrar, como una convección social.

Otro motivo del estrés navideño, suelen ser las tensiones familiares, ya que en casi todas existen problemas que suelen intensificarse en estas fechas, debido al incremento de encuentros y convivencia. Por ejemplo, compartir con un familiar con el que no hay buena relación o tener choques ideológicos entre los miembros, debido a diferencias personales, geográficas…

Lo más importante, es identificar los motivos que generan las emociones negativas y mantener el buen ánimo, con esfuerzo, inversión y tiempo. ¡Que estás Navidades no te estresen!