Deporte e hipoglucemia

La hipoglucemia, es el bajo conteo de azúcar en sangre, lo cual provoca una serie de síntomas característicos de dicha carencia, tales como los mareos, la fatiga, las palpitaciones, la piel pálida, la sudoración o los temblores. Se trata de una condición muy frecuente al realizar actividad física, ya sea aeróbica como anaeróbica. Seguramente, si eres una persona que practica actividad física habitualmente, lo hayas experimentado alguna vez o lo hayas visto en carreras o maratones de ciclismo, por lo que conviene que sepas la razón por la que sucede y que se puede hacer al respecto.

El combustible que utiliza nuestro cuerpo para funcionar, es la glucosa, por lo que cuando hacemos deporte, el organismo la aprovecha para compensar el gasto de energía que supone el esfuerzo tanto físico como mental, al realizar un ejercicio físico. La glucosa se almacena en los músculos, en el hígado y en forma de grasa cuando existe un exceso de la misma. El organismo, extrae la sustancia de las dos primeras fuentes mencionadas y, cuando no son suficientes para enfrentar la actividad que se está llevando a cabo, se genera un cuadro de hipoglucemia. Por lo tanto, si las reservas de glucosa no son suficientes, tendrá lugar una descompensación en el organismo, pero existen más mecanismo por la que se puede presentar la hipoglucemia:

  • Debido a la diabetes e hipoglucemia al realizar ejercicio físico.
  • Debido a la hipoglucemia reactiva.

Para evitar que esta condición sea experimentada, lo más importante será modificar la dieta en base al tipo de actividad que se suela practicar, ya que nos ayudará a progresar en la disciplina sin sufrir consecuencias negativas. Por otro lado, visitar a un especialista en nutrición, puede ayudarnos en el diseño de un plan alimentario específico para nuestros requerimientos diarios.