Seguro en tu viaje al extranjero

Los viajes más largos, suelen preocupar mucho más debido a las paradas del viaje o las necesidades y gastos que conllevan, así como viajar al extranjero, pues puede conllevar una preocupación mayor, al encontrarnos en un país con costumbres y cultura diferentes a las que estamos acostumbrados. No obstante, viajar al extranjero de forma segura es posible e incluso, necesario para disfrutar de la experiencia, por lo que es importante expandir la mente y eliminar los posibles prejuicios.

Para que tu viaje sea seguro y puedas disfrutarlo con tranquilidad, queremos mostrarte una serie de consejos a tener en cuenta:

  • Lleva toda tu documentación, verificando sus fechas de vencimiento.
  • Infórmate sobre tu destino, sobre su incidencia en cuanto al volumen de contagios, restricciones, vacunas obligatorias, moneda o números telefónicos de interés.
  • Habilita tu teléfono para el viaje y poder usarlo, consultando con tu operadora el coste del servicio. Ingresa a tu destino con algunas monedas de tu país, pues puede que consigas un mejor cambio fuera del aeropuerto.
  • Presta atención a tu alrededor cuando te encuentres en multitudes como las visitas a los monumentos y sitios de interés, pues es el momento en el que puedes sufrir un robo.
  • Intenta llevar tu mochila o bolso a la vista o con cierres seguros para evitar posibles robos.
  • Contrata un seguro de viaje. Con esta posibilidad, tendrás a tu disposición una asistencia en el momento que más puedas necesitarla. Cuanto más completa sea la póliza de éste seguro, más ventajas y beneficios podrás obtener, ya que se encargaran de gestionar la evacuación en avión sanitario, problemas derivados de robos, pérdidas de vuelos, emergencias familiares, etcétera.

El último consejo y no menos importante, es sobre todo, no permitir que el miedo o las dudas te quiten las ganas de viajar, pues en una experiencia que ayuda a relajarnos de forma saludable y a mejorar la relación tanto con uno mismo como con las personas que nos rodean.

Tejer para conseguir paz

En los primeros meses de la pandemia, los niveles de los trastornos de estrés y ansiedad se elevaron en la mayoría de la población, generando problemas y dificultades en sus rutinas diarias o incluso para conciliar el sueño. El confinamiento, las restricciones de movilidad o el toque de queda, impuestos para reducir el riesgo de contagio por la enfermedad de la pandemia, también ha tenido sus efectos adversos en la salud de la población.

Algunas personas, han podido sobrellevar y gestionar facilmente sus problemas de estrés y ansiedad, pero sin embargo, muchas otras han tenido más dificultad para poder gestionarlo. Es importante conocer cualquier método de relajación que pueda ayudarnos a encontrar la tranquilidad que necesitamos cada uno, ya que no a todas las personas, nos puede ayudar uno en concreto.

Los métodos más comunes que solemos utilizar para relajarnos, suelen ser escuchar nuestra lista de canciones favoritas, baños relajantes con velas aromatizadas y uno muy popular en esta pandemia, ha sido tejer, pues para muchas personas, ha sido la técnica que les ha permitido entretenerse, concentrarse y sobre todo, relajarse.

Los beneficios que tiene el tejer, son muchos para el cuidado de nuestra salud mental, y aunque sea visto como una practica llevada por las personas mayores, debemos indicar que actualmente, se ha llevado a cabo por personas de distintas edades, ya que ayuda a:

  • Controlar el estrés y la ansiedad.
  • Entrenar la función cognitiva.
  • Alejar el nerviosismo y la intranquilidad.
  • Desintoxicar la mente del uso de aparatos digitales.

Tratamiento para la Anafilaxia

Como mencionábamos en el anterior artículo, la anafilaxia se trata de una reacción alérgica que requiere una atención urgente, por parte de un profesional médico. En el caso de nos encontremos con una persona que pueda estar sufriendo un caso de anafilaxia, es importante ayudarla, prestar atención a todos sus síntomas y sobre todo, no esperar a que los síntomas desaparezcan.

Durante un ataque anafiláctico, en algunos casos debe practicarse una RCP, ya que la persona que lo está sufriendo, no puede respirar o el corazón se le detiene. En los casos menos graves, como dificultades para respirar o tragar, los tratamientos que se le puede administrar a estas personas son:

  • Epinefrina. Su función es para relajar los músculos respiratorios y reducir la respuesta alérgica del organismo. Se trata de una inyección para tratar las reacciones alérgicas, que ponen en peligro la vida.
  • Antihistamínicos y cortisonas. Para poder reducir la inflamación de las vías respiratorias y mejorar por tanto la respiración.
  • Beta agonistas. Son utilizados para abrir las vías respiratorias estrechas y prevenir los ataques de asma, por lo que alivia en gran medida los síntomas respiratorios.
  • Oxígeno. Muchas personas que sufren anafilaxia, suelen tener unos niveles de oxígeno bajos, dependiendo del tiempo que hayan presentado los síntomas, por lo que al acudir a la atención médica, se le administrará oxígenos para ayudarle a respirar.

Para poder utilizar los anteriores tratamientos, es imprescindible tener una prescripción y opinión médica, y para prevenir que esto ocurra, debemos evitar la exposición prolongada a alérgenos y administrar de forma adecuada el antihistamínico que tengamos indicado por nuestro médico.

Anafilaxia por alergia

La anafilaxia, es una de las reacciones alérgicas más peligrosas que pueden sufrir las personas que padecen alergias. Esta reacción, se presenta después de que la persona que sufre alergia, se expone a un alérgeno por mucho tiempo, pues es sensible a alérgenos comunes como por ejemplo el polen.

Este año, debido a la borrasca de nieve de Filomena que afectó a muchas provincias, perjudicó también a las personas alérgicas, ya que como consecuencia de ello, las plantas enraízan con mayor profundidad, favoreciendo su desarrollo. Por otro lado, también provocó la caída de muchos árboles y la rotura de sus ramas, por lo que afectó a su capacidad de desarrollo, produciendo menos pólenes en esta primavera.

Volviendo a la anafilaxia, indicamos a continuación las causas más comunes por las que puede aparecer:

  • Por alergia a algunos alimentos.
  • Por alergia a fármacos y medicamentos.
  • Por picadura o mordeduras de insectos.
  • Por alérgenos inhalados, como el polen.

Es importante prestar atención a los síntomas que se presentan ante una reacción o ataque de alergia, ya que si se da el caso de la anafilaxia, sus síntomas pueden llegar a ser incluso mortales, dado a que se desarrollan de forma rápida incluyendo los siguientes:

  • Molestia u opresión en el pecho.
  • Dificultad para respirar, produciendo tos, silbidos o ruidos de carácter respiratorios agudos.
  • Dificultad para tragar.
  • Mareos, vértigos e incluso náuseas o vómitos.
  • Congestión nasal.
  • Palpitaciones.
  • Inflamación en los ojos, cara y lengua.
  • Enrojecimientos en la piel, urticaria y picazón.

En el siguiente artículo, os informaremos sobre su tratamiento, las posibles complicaciones que puede derivar y sobre todo, cuando acudir a un profesional médico para su rápido diagnóstico.

Conoce el Aquaspinning

En verano, a muchas personas les puede las altas temperaturas como para salir a correr o acudir al gimnasio, ya que el calor puede ser aun más excesivo cuando realizamos actividad física. Pues bien, hoy os contamos qué es el aquaspinning, el ejercicio que nos permitirá seguir realizando actividad física de manera refrescante, incluso los días de más calor.

Actualmente, todos conocemos el spinning, una práctica habitual que se lleva a cabo en los gimnasios, sobre una bicicleta fija en superficies. Esta actividad como muchas otras, se ha actualizado llevándose a cabo también en piscinas. Al practicar este ejercicio en el agua, podremos obtener una mayor fuerza y resistencia en nuestro trabajo y cuidado corporal.

Las bicicletas que se ubican en las piscinas a diferencia de las habituales que encontramos en gimnasios, tienen un cambio fijo, pedales con clips, un manillar de carrera y además, mientras que se va pedaleando, el instructor o la persona que dirija la clase, va guiando al grupo sobre los movimientos necesarios a realizar.

Alivia las picaduras de mosquitos

Con la llegada del calor, muchos mosquitos se disponen a invadir nuestros hogares con el objetivo de molestarnos y lo que es peor, generarnos picaduras. Estas picaduras suelen producir un picor excesivo en nuestra piel, haciendo que rasquemos la zona innumerables veces, generando de tal forma rojeces o heridas.

Para evitar que estas picaduras nos generen daños en nuestra piel, lo primero que debemos evitar es rascarnos, manteniéndonos ocupados para no pensar en el picor y mantener siempre limpia la zona, para evitar infecciones. No obstante, a continuación os mostramos una serie de remedios naturales para bajar la inflamación de las picaduras de mosquito y por tanto, aliviar el picor que éstas nos generan:

  • Aloe Vera. Esta planta tan especial y utilizada en diversos tratamientos, es también muy eficaz para las picaduras de mosquitos, ya que proporciona un alivio, cura la herida generada tras rascarnos y reduce la inflamación.
  • Cebolla. Al igual que la anterior, la cebolla tiene grandes propiedades beneficiosas para el cuidado de la piel y sobre todo en este caso, para las picaduras de los mosquitos. Masajea la zona de la picadura con una rebanada fina de cebolla y posteriormente, enjuaga la zona con agua y jabón para notar su alivio.
  • Vinagre de Manzana. Es especialmente el mejor antiséptico natural, que nos permitirá evitar una infección en la picadura. Puedes hacer uso del mismo, aplicando con un algodón o gasa este vinagre en la picadura, o en el caso de tener muchas, puedes darte un baño con agua y dos tazas de este vinagre.
  • Jabón Neutro. Además de usarlo para lavar la zona, puedes utilizarlo para reducir la inflamación y la picazón. Aplica la pastilla de este jabón sobre la picadura y deja que actúa sin aclararlo.
  • Limón. Al utilizarlo, notarás un ligero ardor en la zona afectada. Puedes aplicarlo exprimiendo medio limón, humedeciendo un poco un algodón o gasa y como última opción, frotando la fruta en la picadura.